Pequeños hoteles con encanto en ULSTER

En Irlanda del Norte, Ulster se revela como una región con grandes atractivos paisajísticos y vitalidad, tras dejar atrás un largo periodo de pugnas políticas. En el condado de Donegal, la península de Inishowen figura como el punto más septentrional de la isla de Irlanda. Y alterna acantilados con sorprendentes conjuntos arqueológicos como el de An Griaan de Aileach, un gran anillo de piedra del siglo V de la realeza gaélica. Pueblos costeros como Greencastle o Bunagee, hacen gala de gran autenticidad.

Monaghan destaca por sus relajantes lagos. El Parque forestal Rossmore comprende hasta ocho. Los drumlins, características colinas redondeadas de origen glaciar, completan el paisaje.

Belfast, la capital del Ulster, ofrece una renacida vida cultural, animada por sus pubs históricos, algunos abiertos desde el siglo XVII.

A menos de un centenar de kilómetros, en la costa norte, se despliega la asombrosa Calzada de los Gigantes y su fascinante relato mitológico. Este conjunto de miles de bloques de forma pentagonal y hexagonal de roca basáltica, resultado de la actividad volcánica y la acción del mar, es hoy Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Entre los nueve valles que configuran los Glens de Antrim despunta el de Glenariff y su parque natural. Al circundar Lough Neagn recuerda que se trata del lago más grande de todo el archipiélago británico.